Nuestra historia
Gozálvez Legal
La historia de Gozálvez Legal empieza mucho antes de que existiera el despacho.
Nace de una convicción: el Derecho debía avanzar al mismo ritmo que la sociedad y la tecnología, sin perder la esencia humana y ética que lo sustenta.
Los inicios: una necesidad que nadie atendía
A mediados de 2020, cuando la digitalización se aceleró de forma abrupta, Marta Gómez —entonces abogada en un gran despacho— comenzó a recibir cada vez más consultas sobre ciberfraude, protección de datos, conflictos tecnológicos y delitos cometidos en entornos digitales.
Observó que muchas personas y empresas se encontraban desprotegidas porque los despachos tradicionales no tenían equipos preparados para estos nuevos retos.
Marta lo veía claro:
“El Derecho está cambiando. Y necesitamos un despacho capaz de conectar la tradición jurídica con la nueva era digital.”
Con esa idea en mente, decidió emprender un camino propio.
La visión toma forma
En 2021 se unió a ella Carlos Ruiz, abogado penalista con amplia experiencia en delitos económicos y procesos complejos. Su incorporación fue clave: Carlos aportaba solidez estratégica, visión procesal y una defensa rigurosa.
Poco después se sumó Javier Torres, especialista en Derecho Digital, LegalTech y ciberseguridad. Javier venía del mundo tecnológico y entendía cómo funcionaban realmente las plataformas, los algoritmos y las infraestructuras digitales. Este equilibrio entre Derecho y tecnología le dio al proyecto una identidad propia.
Para sostener la estructura del despacho y asegurar un trabajo impecable, llegó también Ana López, paralegal metódica y eficiente, creando el soporte perfecto para gestionar expedientes y coordinar documentación con precisión.
Así nació una idea sólida:
Un despacho capaz de unir Derecho Penal, Civil y Digital/Tech bajo una misma filosofía de excelencia, transparencia e innovación.
El nacimiento oficial del despacho
En 2023, después de meses de trabajo, planificación y un objetivo claro, se inauguró oficialmente Gozálvez Legal, en la Calle Jorge Juan 50, Valencia.
El nombre del despacho simbolizaba la combinación entre la tradición del Derecho español y la mirada hacia el futuro que cada miembro del equipo aportaba.
Primeros casos: donde se forja la reputación
Los primeros meses fueron decisivos.
Llegaron casos de:
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Ciberfraudes complejos.
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Empresas cuyos sitios web habían sido copiados.
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Familias con conflictos civiles.
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Procedimientos penales delicados que exigían rigor y estrategia.
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Startups que necesitaban contratos tech, protección de datos y asesoramiento digital.
El enfoque del despacho, cercano y ético, unido a una fuerte capacidad técnica, hizo que los primeros clientes no solo confiaran… sino que recomendaran el servicio.
Pronto aparecieron las primeras opiniones:
“Gran equipo. Serios, transparentes y muy efectivos. Recuperamos lo perdido en un caso de ciberfraude.” — Carlos M.
“Siempre claros, disponibles y con una defensa impecable.” — Javier R.
“Soluciones rápidas y muy claras.” — Laura S., CEO
La reputación creció de forma orgánica.
Identidad actual del despacho
Hoy, Gozálvez Legal es reconocido como un despacho moderno, multidisciplinar y adaptado a los desafíos actuales.
Su esencia se resume en tres pilares:
Tradición jurídica
El rigor, la defensa estratégica y el respeto absoluto a la ética profesional.
Innovación tecnológica
LegalTech, ciberseguridad, propiedad intelectual digital, cumplimiento normativo y análisis de casos en entornos online.
Cercanía y transparencia
Un trato humano, directo y claro, donde el cliente comprende en todo momento qué ocurre con su caso y por qué.
Un despacho con rumbo propio
Hoy, Gozálvez Legal no solo resuelve conflictos: acompaña, transforma y protege.
Su misión es navegar junto a cada cliente —particular, empresa o startup—, marcando el rumbo hacia la justicia, la seguridad jurídica y un futuro digital más seguro.
